Esta mañana cuando me desperté recordé que tuve dos sueños. En uno, en una cadena de noticias, comentaba con "mis compañeros de set" la embarrada que había acabado de cometer mi co-host al cierre de la emisión. Al preguntarnos ella si habría sido muy notoría, hicimos un recuento de imagenes personas del mundo que acababan de ver la noticia y cómo hasta unos pinguinos saltaban repetivamente de la risa...
En el segundo había algo de misterio, algo de prohibido y la presencia de un "alguien" algo extraño, como si no fuera de Colombia. Un backpacker de cabellera muy enrulada y rubia y sus movimientos parecía buscar intimidad, como con necesidad de cercanía. Al final, llegué a sentir sus rulos rozar mi cara en un beso que terminó al sonar la alarma. Nada parecido a la realidad. At all.

Y feliz cumpleaños...
Mi mamá cantó, como suele hacerlo toda mamá, mi hermana me felicitó con un abrazo... Antes de bañarme vi que tres lágrimas rodaron en mi cara, me di cuenta que ya son 25 años escondiendo una sola verdad que opaca mi sonrisa y que no debería ser así.

Un hermosos mail de Alfred me hizo recobrar la felicidad que siempre debe estar en mi cara, afirmándomelo con un "se feliz, por fa".

Muchas llamadas, muchos regalos, muchos dulces, nadie se percató de la insulina...
Me siento amado, por mi y por todos quienes me rodean, expresándolos todos de maneras muy distintas.
Hoy estoy muy feliz conmigo mismo, por encima de mi volubilidad cosntante... y se lo agradezco al Universo, inmensa y eternamente.
Ya hoy me dio un regalo, espero que llegue la noche para que me de otro. Me lo merezco.

Namasté a todos.

Pd. Con ustedes Mademoiselle Björk...